jueves, 10 de febrero de 2011

RELACIONARSE CON CHINOS (I)

Cada país es un mundo y esto le viene como anillo al dedo a China. Uno puede viajar por Europa o América y siempre encontrará cosas familiares y una forma de vestirse o comportarse similares a las nuestras. Pero cuando ponemos el pie en China todo cambia.
Casi todo lo que os cuento a continuación, vale tanto para chinos, como, japoneses. Sobre todo los japoneses son un pueblo muy protocolario y de gran respeto por sus costumbres y sus mayores. Aun en la actualidad conservan costumbres ancestrales que en otros países, como los europeos, hemos ido perdiendo con el tiempo.

SALUDOS:

Al relacionarse con extranjeros cada país tiene las sus propias costumbres y así como los estadounidenses no dan besos al saludarse y los franceses o españoles damos uno en cada mejilla, lo cierto es que los chinos le huyen a este tipo de contacto físico y dedican apenas una breve inclinación. Aunque ahora están estrechando la mano (los japoneses ni eso) costumbre adoptada de los occidentales, pero lo justo, ni abrazos, ni palmadas en la espalda.

Y entre hombres y mujeres con la inclinación es más que suficiente. Es una cuestión educacional, pues aunque los chinos siempre han sido bastante tradicionales y puritanos en esta materia, durante los años de la famosa Revolución Cultural de Mao cualquier demostración de afecto o sexualidad estaban prohibidos, nadie podía besarse o caminar de la mano, pero hoy la situación ha comenzado a cambiar entre la juventud.

Por supuesto que estos cambios se ven primero en las grandes ciudades. No es lo mismo una aldea perdida en la frontera con Mongolia que Hong Kong, Beijing o Shanghái.

En ocasiones formales utilizan la reverencia (como los hemos visto en la tele tantas veces), cuando se hace, a diferencia de la reverencia japonesa, se hace doblando la cintura, y no solamente con la cabeza como lo hacen los japoneses (aunque nosotros vimos a unos japoneses en una cena que casi la hacían hasta el suelo, claro que, se les debió ir la mano con el sake e iban un poco perjudicados).
La reverencia que hacen para saludar, puede darnos una pista sobre la importancia de la persona saludada. Cuanto mayor es la reverencia y de mayor duración, mayor es la importancia de la persona a la que se saluda (salvo que hayan empinado el codo).
Pero bueno, lo cierto es que como todo oriental que se precie los chinos son puntillosos, educados y protocolarios hasta decir basta. Con ellos hay que estar bien vestidos, bien peinados, nunca mostrar impaciencia y siempre mostrar atención.

Si te dan una tarjeta de visita (cosa que les encanta), después del protocolario saludo te la darán con las dos manos, y debes cogerla, igualmente, con las dos manos, lo mismo hacen cuando te devuelven la tarjeta de crédito al pagar. Cuando recibas la tarjeta de visita no la guardes de inmediato. Debes examinarla con detalle durante un pequeño tiempo para que ellos vean que muestras interés.
No leer una tarjeta de visita que te acaban de dar y llevarla directamente al bolsillo o a la cartera, es una falta de educación (mi pobre maridito que trata con ellos todos los días, me va a acabar más oriental que Shin Chan). Y si metes la tarjeta en la cartera, nunca la pongas en el bolsillo de atrás del pantalón, menuda ofensa, pues te sentaras sobre ella.

Si quieres ganarte su confianza, no dudes en hablar de su cultura, lo agradecerán mucho, pero cuidado con los temas que eliges, más adelante os hablo de ello.

DIRIGIRTE A ELLOS:

Tradicionalmente los chinos utilizan en primer lugar su apellido seguido de su nombre de pila que puede constar de una o dos sílabas (ellos los llaman caracteres, pues no tienen letras) , y en ocasiones puede estar separado por un guión. Por ejemplo, el famoso Mao Zedong (para nosotros Mao Tse-Tung) se llamaba Zedong, Mao era el apellido.

No te puedes dirigir nunca a un chino únicamente por su nombre de pila o por su apellido, siempre la fórmula completa de apellido + nombre. Sino es una incorrección. Para hacerlo hay que establecer una relación muy cercana con ellos, y eso es una cuestión bastante difícil en China, en parte debido a las grandes diferencias en lo que a cultura y costumbres se refiere. Solamente los chinos pueden llamar por su nombre de pila a sus familiares y amigos más cercanos.

Y hay que tener en cuenta que utilizan el tratamiento de cortesía (el señor y señora, en chino Xiansheng y Nushi ) en orden inverso al nuestro, es decir, si os presentan a alguien como Sr. Den, la forma correcta de dirigirse a esta persona es; "Den Xiansheng" (Den Señor).

Las mujeres a veces llevan nombres que repiten el mismo carácter, como Xiuxiu o Lili. Esto se da menos con los varones, aunque Yo-Yo Ma es una excepción muy conocida. (Conocemos a una china en La Coruña, con nombre doble, verdad Conchi?)

En algunas familias, uno de los dos caracteres del nombre de pila se repite en todos los miembros de una generación. Además, los nombres de los hermanos a menudo se relacionan; por ejemplo, un niño puede llamarse pino (que se considera masculino) y su hermana se puede llamar ciruela (que se considera femenino).

Otras veces pueden reflejar también periodos de la historia. Por ejemplo, muchos chinos nacidos durante la Revolución Cultural tienen "nombres revolucionarios, como "pais fuerte" (強国) o viento oriental (东风).

Mañana la segunda parte.

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